Así son los microdramas chinos que conquistan la pantalla vertical


Los chinos lo hicieron otra vez: como TikTok, como el 11.11, como el livestreaming, el país asiático ha logrado imponer una nueva moda que está atrapando a norteamericanos y europeos por igual. Hablamos de los microdramas chinos, conocidos como «wei duan ju», que son novelas de varios episodios de entre 1 y 5 minutos de duración, diseñados para verse en formato vertical. Este fenómeno, que comenzó en plataformas como Douyin (el TikTok chino) y Kuaishou, ha generado ingresos por 37,3 mil millones de yuanes en 2023 (alrededor de 5.2 mil millones de dólares), y se espera que para 2025 supere los 100 mil millones de yuanes (más de 13,8 mil millones de dólares).

El éxito de estas microtelenovelas está en la capacidad de ofrecer historias intensas y adictivas en un formato breve y accesible. Con tramas que van desde romances apasionados hasta venganzas dramáticas, cada episodio termina en un «cliffhanger» (pico de tensión narrativo), que incita al espectador a seguir viendo. Este formato ha encontrado un público fiel entre trabajadores de mediana edad y jubilados, quienes valoran la posibilidad de disfrutar de contenido entretenido en cualquier momento y lugar.

Qué son los microdramas chinos

Este formato de novela corta surgió en 2018, impulsado por la creciente adopción de smartphones y el auge de plataformas de vídeo corto como Douyin y Kuaishou. Sin embargo, el gran impulso llegó en 2020 con la pandemia, ya que el confinamiento aumentó la demanda de contenido digital accesible y de corta duración.

Los episodios están diseñados específicamente para el consumo rápido en dispositivos móviles, con envíos que duran entre 1 y 5 minutos y se presentan en formato vertical. Cada serie cuenta con entre 40 y 100 episodios, por lo que, en total, no suelen superar la duración de una película.

Una de las principales ventajas de los microdramas es que son fáciles y económicos de hacer. Por ejemplo, una serie de nivel profesional y 55 capítulos puede rodarse en apenas cuatro días con un presupuesto de 400.000 yuanes (unos 53.000 euros). Aunque producciones más modestas pueden costar menos de 5 mil euros. Esta eficiencia ha permitido la proliferación de contenido y la rápida expansión del formato.

Ciudades chinas como Hengdian (donde se ubica Hengdian World Studios, una especie de «Hollywood» chino), se han convertido en grandes sets de grabación y en un destino de oportunidades laborales para todo tipo de aspirantes que buscan triunfar en el mundo de la actuación, desde bailarinas hasta empleados de la construcción. En 2024, la ciudad fue escenario de 1.500 rodajes de microdramas.

Dónde ver estas producciones

En China, estos microdramas pueden verse en aplicaciones como Douyin, Kuaishou y WeChat Video Channels. A nivel global, plataformas como WeTV, ReelShort y Rakuten Viki, Dailymotion, YouTube, GoodShort, MangoTV o iQIYI ofrecen series subtituladas o dobladas al español.

El público de los microdramas es diverso, pero destacan los trabajadores de mediana edad y los jubilados, quienes encuentran en estos contenidos una forma accesible y rápida de entretenimiento. Además, la expansión internacional del formato está atrayendo a nuevas audiencias en diferentes países.

Por ejemplo, en Estados Unidos hay producciones locales muy populares, como la cuenta de Instagram EAVESDROPPING (the show), que muestra la historia de dos amigos que «intentan seguir siendo amigos». esta serie también está disponible en Patreon y en formato podcast en Spotify:

En cuanto a los géneros, hay de todo, desde las típicas novelas de buenos y malos bien definidos (el pobre bueno, versus el millonario despiadado), historias de amor, historias modernas de enredos adolescentes, historias de amores desencontrados, producciones de época, relaciones matrimoniales y familiares desiguales y retorcidas, etc. Para que te hagas una idea, algunos títulos populares son: «Prometido», «Me casé con tu padre», «La venganza de la criada», «La doble vida de mi esposo millonario», o «Destinada a mi alfa prohibido».

Por qué son tan adictivas

La adicción a los microdramas se debe a varios factores. Las tramas suelen ser intensas y están diseñadas para enganchar al espectador desde el primer minuto. Los episodios terminan en momentos de suspenso, lo que provoca que los espectadores quieran ver el siguiente episodio de inmediato. Además, la brevedad de los episodios permite consumir varios en poco tiempo (o eso es lo que el usuario percibe), adaptándose al modo de vida actual, tan dinámico y vertiginoso.

Por otro lado, los primeros episodios suelen ser gratuitos, pero para acceder a los siguientes, los espectadores deben pagar o ver anuncios. Este sistema de micropagos y recompensas mantiene a los usuarios comprometidos y genera ingresos significativos para las plataformas. De hecho, las marcas encuentran en estos formatos un excelente escenario para invertir en publicidad barata y efectiva.

Según datos de Sensor Tower, hasta marzo de 2025, las aplicaciones para ver estas microtelenovelas fueron descargadas unas 950 millones de veces a nivel mundial y Estados Unidos es el mercado más rentable. Le siguen América Latina y el Sudeste asiático, donde solo durante el primer trimestre del año se registraron cerca de 100 millones de descargas y 87 millones, respectivamente.

Un mercado millonario

En 2023, el mercado alcanzó los 37,3 mil millones de yuanes (alrededor de 5,2 mil millones de dólares), y se espera que para 2025 supere los 100 mil millones de yuanes (más de 13,8 mil millones de dólares). Según la Asociación de Servicios de Internet china, en 2024 se produjeron cerca de 30.000 microtelenovelas, generando ingresos por 7.000 millones de dólares para el país, una cifra bastante superior a la que generó la industria cinematográfica, estimada en 5.800 millones de dólares.

Este crecimiento ha atraído a numerosos actores y guionistas jóvenes, quienes ven en los microdramas una oportunidad para desarrollar su carrera en un entorno dinámico y menos jerárquico.

Además, el éxito de este formato audiovisual ha despertado el interés de productores y plataformas internacionales. Empresas como ReelShort, respaldada por Tencent y Baidu, están llevando el formato a Estados Unidos y otros mercados, adaptando las historias para atraer a audiencias locales.

Foto: Rakuten Viki





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