Escala tu eCommerce internacionalmente con pagos sin fricciones
La expansión del comercio digital ha facilitado que muchas empresas puedan vender más allá de sus mercados de origen. Sin embargo, los pagos siguen siendo uno de los mayores retos operativos a la hora de internacionalizar un ecommerce. Aspectos como la aceptación de múltiples divisas, las preferencias regionales de pago o la necesidad de integrar distintos sistemas tecnológicos suponen una barrera para muchas compañías.
Craftgate es una plataforma que busca reducir esta complejidad mediante un enfoque centralizado. Su propuesta consiste en permitir pagos sin fricciones a través de múltiples métodos locales o globales, sin que los comercios tengan que gestionar manualmente cada integración. Esto permite atender a clientes de distintas regiones —como Europa, Oriente Medio o América Latina— usando su divisa habitual o, en su defecto, una reconocida como el euro.
La clave está en abstraer la complejidad técnica: los comercios no necesitan desarrollar integraciones independientes para cada proveedor ni adaptar constantemente sus sistemas. En lugar de ello, utilizan una infraestructura unificada que se adapta automáticamente a las condiciones de cada mercado, manteniendo una experiencia de usuario homogénea y coherente.
Un panel único para supervisar, automatizar y optimizar
Uno de los componentes fundamentales de Craftgate es su panel de gestión centralizado, desde donde los comercios pueden visualizar y controlar sus operaciones de pago. Esta herramienta está diseñada para ofrecer una vista única de todo el ecosistema, independientemente del número de proveedores o divisas que se estén utilizando.
Desde este panel, es posible:
- Integrar múltiples proveedores de pago a través de una sola conexión, reduciendo costes técnicos y tiempos de implementación.
- Monitorizar todas las transacciones en tiempo real, accediendo a un historial completo y a métricas de rendimiento.
- Reintentar automáticamente los pagos que han fallado, con el fin de minimizar el abandono del carrito.
- Aplicar reglas de enrutamiento inteligentes, que redirigen las operaciones en función de las tasas de éxito o las comisiones aplicadas por cada proveedor.
- Consultar análisis detallados, útiles para detectar patrones de comportamiento y optimizar la estrategia de pagos.
- Cumplir con regulaciones como PCI DSS, lo que garantiza que los datos de pago se manejan de forma segura y conforme a los estándares globales.
Este modelo de orquestación permite que el equipo técnico del comercio se libere de muchas tareas de mantenimiento y configuración. La plataforma se adapta automáticamente a las condiciones cambiantes, ya sea en términos de proveedores, requisitos regulatorios o hábitos de consumo.
Escalabilidad sin fricciones: de lo local a lo global
Más allá de facilitar la integración y supervisión, Craftgate incluye funciones propias de orquestación de pagos. Esto implica que el sistema no solo procesa transacciones, sino que también toma decisiones activas para mejorar el rendimiento general.
Por ejemplo, es posible modificar las reglas de enrutamiento en función del comportamiento observado en tiempo real, lo que permite adaptarse a condiciones específicas del mercado sin requerir intervención manual. Además, se pueden incorporar nuevos métodos de pago sin necesidad de desarrollos adicionales, lo que resulta especialmente útil al entrar en mercados con hábitos de consumo distintos.
Craftgate fue desarrollada originalmente en Turquía, un mercado con alta competitividad y diversidad de métodos de pago. Esta experiencia local sirvió de base para extender su modelo a nivel internacional. En la actualidad, la plataforma da soporte a comercios digitales de distintos países, ayudándoles a mantener una operación consistente en entornos multicurrency y multicanal.
También dispone de módulos listos para integrarse con plataformas populares como Shopify o PrestaShop, lo que facilita su adopción en eCommerce que ya tienen una infraestructura tecnológica establecida.
La gestión de pagos globales requiere flexibilidad, seguridad y visibilidad, y la orquestación se presenta como una alternativa cada vez más común para enfrentar estos desafíos sin multiplicar los costes técnicos ni operativos.